Muchas veces hemos oido hablar de Fascitis plantar, sobre todo si estamos adentrados en el mundo del deporte. Pero ¿sabemos exactamente qué es?...

La fascia plantar, es una estructura plana, gruesa y fibrosa, formada por tejido conectivo, situada en la planta de nuestro pie, que se origina en el calcáneo y se inserta en todas las falanges proximales. Esta fascia o ligamento grueso se extiende en cada uno de nuestros pasos.

¿QUÉ ES LA FASCITIS PLANTAR?

La fascitis plantar, es la condición más común de dolor en el talón. Esto ocurre, cuando el ligamento fibroso de la fascia plantar a lo largo de la parte inferior del pie, provoca desgarros en los tejidos, produciendo dolor e inflamación.

El dolor o inflamación, se encuentra cerca de donde la fascia se une al calcáneo, también conocido como hueso del talón. Aunque el dolor puede empezar a desarrollarse en la parte interna de nuestro tobillo.

CAUSAS.-

Las causas de esta afección, pueden ser muy variadas y multifactoriales, depende en gran medida de factores ambientales, posturales, genéticos…Las causas más comunes suelen ser.-

1. SOBRECARGA POR ACTIVIDAD FÍSICA O DEPORTIVA: La fascia plantar es como una goma elástica que se suelta y se contrae con nuestro movimiento. Absorbe el peso y la presión. Esta puede sobrecargarse por realizar actividad física o ejercicio, siendo los atletas muy propensos a este tipo de dolencia. Si corremos en exceso, saltamos o hacemos otras actividades que hagan que realicemos un esfuerzo repetitivo o excesivo del tejido o bien aquellos atletas, también que aumentan la dificultad de sus rutinas de ejercicios, seremos o serán muy propensos a sufrir fascitis plantar en su nivel severo.
2. RETRACCION DEL TENDÓN DE AQUILES: Tener condiciones tales como pies planos o pronadores, alteraciones en la marcha, puede dar lugar a que nuestro tejido facial, presente un exceso de trabajo o se estire de forma anormal, dando lugar a desgarros en inflamación.
3. ENFERMEDADES CONCOMITANTES: La artritis es otra de las causas más comunes. Hay tipos de artritis que pueden causar una inflamación en el desarrollo de los tendones, dando lugar a una fascitis plantar. Esta causa es particularmente común entre los pacientes de edad avanzada. La diabetes, es también un factor, que puede contribuir al dolor en el talón y más daños, sobre todo entre los ancianos. Cuidado no confundir este tipo de trastorno con la gota, que afecta principalmente a pies y rodillas.
4. CALZADO INCORRECTO O DEFECTUOSO: Entre los factores más populares que contribuyen a la fascitis plantar, es el uso de zapatos incorrectos. En muchos casos, los zapatos, o bien no se ajustan adecuadamente, o proporcionan un apoyo o amortiguación inadecuada. Si caminamos o hacemos ejercicio con zapatos inadecuados, la distribución del peso es mala y significativamente el estrés puede dañar al ligamento o fascia plantar.

En resumen la fascitis plantar es una inflamación del ligamento arqueado, que se puede producir por micro traumatismos repetitivos o uso excesivo. Muchos atletas la sufren, especialmente aquellos que practican, atletismo, fútbol, tenis y baloncesto. También serán más propensos aquellos que practiquen deporte a nivel aficionado, que un profesional, tanto por el calzado, como por su velocidad en carrera, ya que a ritmos lentos, es más probable que se inflame. Entre los más afectados, son aquellos adultos que tienen sobrepeso y hacen deporte.

FACTORES DE RIESGO.-

Con tantas causas como hemos visto, muchos son los factores de riesgo que debemos tener en cuenta. Como la actividad en deportes y ejercicios regulares, pueden ejercer una tensión significativa en el talón y el tejido circundante. Además si tenemos pie plano, debemos considerar tener un relleno del zapato para contrarrestar el estrés causado por la mecánica anormal del pie. La edad también como vimos, juega un papel importante, así como el sobrepeso, mujeres embarazadas, personas que pasan mucho tiempo de pie, mujeres que usan tacones altos, botas u otros zapatos que no proporcionan el soporte adecuado del talón.

SÍNTOMAS.-

La queja más común de la fascitis plantar, es una sensación de ardor o punzadas de dolor en el talón. Esto se suele dar más por la mañana, ya que en la noche, el pie se contrae mientras dormimos, causando el dolor al volver a estirarlo, siendo este muy agudo.

Dicho dolor suele disminuir, una vez que el tejido calienta, pero regresará fácilmente después de largos períodos de pie, de actividad física o una vez nos levantemos, después de estar tiempo sentados.

El dolor puede llegar a ser insoportable en el apoyo o durante el movimiento dorsal del pie.

En su primera fase: comienzo del dolor, los síntomas tienden a disminuir después de unos minutos de empezar el tratamiento en el caso de los deportistas. En los adultos los peores momentos son al levantarse o después de estar sentado durante tiempo, como comentábamos anteriormente, con el tiempo de haber empezado a caminar disminuye, hasta desaparecer.

En la segunda fase: el dolor es más intenso y tarda más en bajar, necesitaremos al menos una media hora, para que se nos pase una vez levantados o al principio de nuestro entreno, por lo que tanto empezar a caminar, como realizar una actividad física o deportiva, se convierte cada vez en un reto más difícil.

DIAGNÓSTICO.-

El profesional que lleve el caso, recogerá la historia del paciente, en busca de sus síntomas, presionando con el dedo en la zona, evaluando el movimiento, la sensibilidad y la longitud del músculo o cualquier anormalidad anatómica, como pies planos, pronación, etc.…

Se harán pruebas, tales como radiografía, para descartar fracturas, análisis, para enfermedades como la gota y electrocardiograma, que destaca el posible atrofiamiento de un nervio.

TRATAMIENTO.-

La fascitis plantar, como la tendinitis, debe ser abordada y atendida lo antes posible, porque si se vuelve crónica, puede llevar varios meses hasta que se cure.

El cuerpo de cada persona, responde al tratamiento de una manera diferente e incluso los tiempos de recuperación pueden variar. En primer lugar, si practicamos deporte, es esencial dejar dicha actividad deportiva, ya que agravaría nuestra situación.

Un tratamiento para la fascitis, puede ser una ortesis, que es un dispositivo que puede ser introducido en cualquier tipo de zapatos y puede aliviar el dolor y ayudar a revertir el daño y su aparición. Se realiza mediante la adición de soporte para el talón y ayudar a distribuir el peso durante el movimiento.

Uso de un talón de silicona para suavizar y proteger el apoyo en el suelo alivia el dolor, pero no es curativo.

También algunos especialistas, recomiendan el uso de una férula durante la noche para mantener el pie en flexión dorsal, teniendo durante el día que ejecutar un estiramiento de los gemelos y el soleo, debido a la retracción de los músculos, que es una de las causas de la inflamación.

Hay otros procesos más invasivos, como las inyecciones de corticoesteroides, terapias de ondas de choque y por último la cirugía. Esta última es muy arriesgada y produce muchas dificultades además puede no ser concluyente, por lo que es vital esperar un año después de la aparición de los síntomas y buscar un especialista ortopédico del pie.

PREVENCIÓN.-

Se puede prevenir de varias maneras; ya sea con plantillas personalizadas para corregir el apoyo del pie, manteniendo un peso saludable, para reducir tensión en la zona. Además nuestros zapatos deben ser ajustados y proporcionar amortiguación suficiente.

También es importante evitar caminar descalzos, sobre superficies duras.

Si hacemos ejercicio, procurar iniciar el mismo lentamente y realizar nuevas rutinas, para evitar el estrés repentino o excesivo de los tejidos. Por último, mantener los músculos de la pantorrilla y el tejido de sus pies estirados.

Esperamos que este post os sirva de ayuda si sufris de dicha inflamación o os pueda ayudar para prevenirla en un futuro, ya que es algo muy doloroso y molesto.