Utilizamos cookies propias y de terceros. Algunas son necesarias para el funcionamiento de la web. Otras para seguimiento en redes, publicidad según tus hábitos de navegación o realizar tareas de análisis. Gestiona su uso a tu gusto.

LAS CANAS, ¿TE ATREVES A LUCIRLAS?

Posted By: Semilla Proyectos In: Noticias y productos On: Comment: 0 Hit: 3022

En esta ocasión me gustaría hablaros de las canas, un tema de plena actualidad por el nuevo cariz que ha tomado el hecho de “sufrir” su presencia. Hasta hace algún tiempo para mucha gente suponía un auténtico drama empezar a ver su pelo canear porque el espejo te recordaba el inexorable paso del tiempo y lo efímero de la juventud.

Actualmente hay una tendencia, como casi siempre auspiciada por las CELEBRITIES, de dejar el cabello natural y no intentar disimular la presencia de las canas. Por otra parte es algo que tarde o temprano afecta a todos los seres humanos (y ahora que personalmente empiezo a lucir con orgullo su presencia) el tema de este post me emociona especialmente.

 

    Inicialmente el cabello es blanco y obtiene su color natural de un pigmento denominado melanina que determina el tono del pelo entre otras cosas. Con el paso del tiempo y la consiguiente disminución de esa melanina nuestros cabellos se van tornando grises o blancos. Como en todo tipo de estadísticas los resultados son torticeros pero se dice que la probabilidad de que el cabello se vuelva gris incrementa entre un 10% y un 20% cada década después de los 30 años.

 

    Podemos distinguir cuatro tipos de canas en función de su fisiología y del momento en que aparecen:

    1. Canicie fisiológica o de senescencia: es aquella que se produce por el  envejecimiento natural de una persona. La primera zona en verse afectada es la de las sienes, siendo seguida por la parte posterior de la cabeza hasta alcanzarla por completo.

    2. Canicie prematura: es  aquella que aparece antes de cumplir los 20 años  en caucásicos o antes de los 30 años en personas de raza negra. Pueden darse por diversos factores. En casos raros puede surgir desde la infancia o incluso de nacimiento en casos de albinismo.

    3. Poliosis: se trata de una canicie de carácter localizado, es decir afecta a mechones de pelos en concreto, a las cejas o pestañas. Este tipo de canas surgen normalmente debido a un proceso hereditario.

    4. Canicie anular: se caracteriza por su discontinuidad, ya que los cabellos blancos aparecen sueltos y repartidos por la cabeza generalmente, aunque también puede presentarse en grupos o mechones. 

¿Por qué salen las canas?

    - El paso del tiempo o envejecimiento natural. Envejecer es parte del destino de los seres humanos (a no ser que seas Jordi Hurtado) y el tener canas tarde o temprano es parte de nuestra genética, de forma que a medida que vayamos entrando en años iremos presentando cambios capilares. Es importante señalar que se aprecian diferencias en cuanto al momento de aparición de las canas en función del grupo étnico al que se pertenezca: los caucásicos son los primeros en verse afectados por la aparición de éstas, en torno a los 30 años, siguen los asiáticos que comienzan a tener canas a los 40 y por último gran parte de los negros conservan su color hasta pasada la cuarentena. 

    - La herencia. Es el factor más importante en la aparición de las canas. Nuestros genes marcan los cambios físicos que ha de experimentar nuestro cuerpo. De manera que lo más probable es que sigamos la misma tendencia de nuestros padres, ya sea para tener muchas canas o pocas, o, por ejemplo, para sufrir una canicie prematura.

    - El tabaquismo.Fumar es perjudicial y la única certeza que podemos tener es que en algún momento de nuestra vida este hábito nos traerá problemas. Algunas investigaciones apuntan a que el tabaco aumenta la precocidad de las canas, sobre todo si va unido al alcohol.

    - Falta de vitamina B y B12.  Hay menores de 35 años que ya poseen canas como consecuencia de una carencia de vitaminas del grupo B. Alimentos como el aguacate, salmón, frutos secos, yema de huevo, zanahorias y antioxidantes pueden ayudar a combatir su prematura aparición.

    - Enfermedades. Pueden aparecer canas debido a algunas enfermedades tales como el hipotiroidismo o la anemia perniciosa, relacionadas con la deficiencia de vitamina B12, el vitíligo, el síndrome de Waardenburg, una secuela de la patología de “Basedow”, etc. También pueden surgir canas como efectos colaterales de otros problemas médicos y/o por las contraindicaciones de algunos medicamentos, aunque en estos últimos supuestos no tienen carácter permanente. 

Desmontando mitos

    Después de más de tres lustros dedicándonos entre otras cosas al cuidado personal he tenido que escuchar todo tipo de leyendas referidas a infinidad de temas estéticos. Las canas no pueden ser menos y hay muchos mitos instalados en el subconsciente colectivo y que no tienen ningún tipo de fundamento científico pero que se encuentran fuertemente arraigados en las creencias populares como los siguientes:

    a) El estrés provoca su aparición.  No está explícitamente demostrado. Evidentemente llevar un ritmo de vida relajado nos ayudará a conservar nuestra lozanía en todos los aspectos.  El deporte moderado es, en general, una buena manera de relajarnos, pero destacan en este aspecto disciplinas tales como el taichí, el yoga o el pilates (al que me he aficionado hace algún tiempo como os comenté en un post anterior, espero que no repercuta en la desaparición de mis orgullosas canas) cuya práctica continuada proporciona una óptima relajación y además nos ayuda a encontrar la armonía física, espiritual y mental pero no tiene ningún tipo de relación directa con la formación de melanina. Nos mantendremos jóvenes y relajados pero (me temo que) canosos.

    b) Arrancar una cana hace que te salgan siete más. Evidentemente es totalmente falso. Lo que vas a conseguir arrancándote una cana es tener cada vez menos pelo si eliminas el folículo piloso y deteriorar tu imagen pero lo que hagas a un cabello no va a afectar a sus compañeros.

    c) El sol potencia su aparición. También es rotundamente falso. La luz del sol puede aclarar el cabello, pero en realidad no existe una clara evidencia científica que indique que una mayor exposición a los rayos ultravioletas puede provocar que aparezcan más canas.

    En el mundo de la cosmética en los últimos años ha habido un notable incremento de productos especialmente formulados para el pelo plateado. En nuestra web puedes encontrar innumerables champús y mascarillas para evitar la tendencia al amarilleo de nuestras canas.

hombre pelo canoso

   

Desde esta privilegiada atalaya que supone el blog de NG Distribuciones desde el que nos dirigimos a todos vosotros una vez al mes me gustaría hacer un alegato a favor de la naturalidad en el cabello, al menos una vez que te llega la edad “interesante”. A mí personalmente el pelo teñido a cierta edad (especialmente en los hombres) me ha parecido siempre que te endurece las facciones. Además resulta antinatural ese tono homogéneo que no se corresponde con el color natural que siempre presenta reflejos, partes más claras, irregulares y nunca esa perfección que a mí me recuerda un casco. Además recurriendo al refranero “canas tintadas tapan años, no calendarios” y “más vale tener canas que quedarse con las ganas”. Por otra parte hay estudios que muestran que el 72% de las mujeres encuentran a los hombres canosos más atractivos y claro, en mi permanente afán por mejorar constantemente no podía dejar pasar esa ayuda que el tiempo me va a proporcionar de manera gratuita.

    Ahora que constantemente oímos hablar de paridad es interesante observar que no hay estadísticas respecto a las preferencias de los varones por las mujeres con canas. También perduran reminiscencias machistas ya que a los varones se les denomina en otros países SILVER FOX (zorros plateados) mientras que a ellas se les llama GRANNY HAIR (literalmente, pelo de abuela) perpetuando la falsa relación entre canas y vejez y denigrando de nuevo a las mujeres a favor de los varones.

  Espero haberos ayudado con este post y si os encontráis ante la disyuntiva de teñir o no podéis ver que hay tantas alternativas como personas. Como la vida misma.

By Nacho González

Comments

Leave your comment