Inicialmente utilizada en medicina, a día de hoy la oxigenoterapia también se incorpora dentro de los tratamientos de estética.

Inicialmente utilizada en medicina, a día de hoy la oxigenoterapia también se incorpora dentro de los tratamientos de estética.

Este tratamiento consiste en suministrar oxígeno puro para que las células mantengan su metabolismo normal. Sus aplicaciones son múltiples, ya sea en tratamientos faciales o corporales. La inhalación directa de oxígeno es uno de los últimos descubrimientos en lo que a belleza y salud nos referimos.

Una gran cantidad de clínicas internacionales, han incorporado esta terapia para sus tratamientos estéticos, tras reconocer su capacidad para retardar la aparición de arrugas y aportar luminosidad a la piel. Además, estimula el metabolismo celular, descongestiona los tejidos y favorece la circulación sanguínea.

Solemos llevar en la mayoría de los casos, un ritmo frenético de vida, acompañado de una no siempre saludable alimentación, junto con otro tipo de hábitos vitales poco aconsejables (tabaco, alcohol, etc...). Esto hace que nuestra piel sufra y proyecte que no estamos tratando bien a nuestro cuerpo. Esta falta de elasticidad e hidratación es un primer aviso de que nuestros hábitos deberían mejorar.

Para poder combatir estos efectos en nuestra piel el uso alternativo de oxígeno persigue precisamente, mejorar ese aspecto, hidratación y tersura. Pero además, este no es el único beneficio de la oxigenoterapia, a continuación te detallamos más:

• Aumenta el metabolismo de la piel y el tejido profundo.
• Mejora la firmeza de la piel (reducción de arrugas y flacidez cutánea), gracias a que estimula la producción de colágeno.
• Provoca un efecto reductor del volumen, puesto que favorece la micro-circulación, y por tanto, mejora el aspecto de la piel con celulitis.
• Ayuda a reducir los poros y aporta humedad, por lo que resulta muy útil en tratamientos anti-acné.
• Puede ser despigmentante, por lo que está indicada para atenuar ojeras y algunas manchas de la piel.
• Tiene también un efecto relajante.

Las sesiones de oxigenoterapia cuentan con unos porcentajes superiores al 95% de oxígeno, el aire que respiramos tiene una proporción de algo más de un 20%, por lo que es muy importante, como siempre en este tipo de terapias naturales, acudir a centros con especialistas en la aplicación de este gas.

En principio, el oxígeno ionizado, que es así como se administra en los tratamientos de belleza, bien administrado no es nocivo, por lo que se puede aplicar a todo el mundo. No obstante, las personas con enfermedades graves deben antes consultar a su médico por si existiera algún tipo de contraindicación que desaconsejara un tratamiento a base de oxígeno.

Ya sabéis, la oxigenoterapia puede servir para paliar muchas de las enfermedades de la piel, pregunta en tu centro de estética habitual.